Universitarios lejos de su familia

Muchas veces acuden a consulta estudiantes de pregrado que viven solos, cuyas familias estan en el interior del país o viven en otros paises. Una constante es el sentimiento de soledad y desconexión por no contar en su vida cotidiana con el apoyo emocional de padres y hermanos o de aquellos con quien hasta el momento han compartido.

Estas familias  envían a sus hijos e hijas en la perspectiva de una mejor educación que les de mayor competitividad en el campo laboral.

Chicos(as) desde los 16 a los 24 años tienen que afrontar cambios en su estilo de vida, estrenar responsabilidades con el dinero, con la organización de la vivienda, decidir donde consumir sus alimentos y que hacer con el tiempo libre.

Las mayores dificultades las enfrentan quienes han sido sobreprotegidos y no están familiarizados con tomar decisiones. Los tímidos o quienes provienen de entornos menos modernos experimentan el reto de adaptarse en detalles importantes,como a quienes frecuentar como amigos o amigas, si mantener o cambiar su modo de hablar y relacionarse  con los otros.

Muchos de ellos tienen alguna familia y pueden establecer contacto con parientes que de acuerdo a su historia personal y forma de vida estos serán más o menos acogedores con el estudiante.

Los riesgos de gastar más de lo que se tiene, de no alimentarse bien, de no saber a donde acudir en caso de enfermedad o apuros y de relacionarse con falsas amistades que los tientan a faltar a clases o a ciertas adicciones también está presente.

Muchas universidades ya están tomando acciones para establecer redes de apoyo social entre estudiantes de provincia. Una forma eficaz de hablar con otros de lo que se siente estando en un medio diferente.

La comunicación con la familia es importante pero también que los estudiantes posean o desarrrollen habilidades para adaptarse y disfrutar de la gran oportunidad de crecimiento que les da el vivir solos, usando la autonomía, la iniciativa y el autocontrol.

Probablemente quienes tienen facilidad para vincularse o practican deportes o música  se adaptaran más rápido y presentaran menos problemas de depresión, ansiedad, problemas de concentración o de conductas adictivas como expresión de un malestar interno que no pueden manejar.

El acompañamiento de los consejeros, tutores, adultos y chicos(as) de la misma edad es importante para que está etapa sea enriquecedora y no disminuya su salud mental. Si tenemos chicos o chicas que no han resuelto sus problemas con padres o hermanos probablemente presentaran dificultades en las relaciones que inicien en su etapa universitaria.

Muchas veces los vínculos sentimentales son un escape a la soledad..a través de pasar tiempo juntos de manera constante para no afrontan la tristeza de la separación o a  se pueden empeñar en ayudar a otros en sus problemas buscando inconscientemente recibir esa atención y ayuda ellos mismos.

Por ello pensamos que es una población vulnerable que requiere la atención de la familia, instituciones educativas y del entorno que recibe a estos estudiantes quienes se encuentran afirmando su identidad.